Skip links

Reciclaje de baterías: una solución sostenible para la industria

A través del tiempo se han ido modernizando las tendencias económicas, sociales y ambientales, donde hoy en día, el contexto global cuenta con una presión por descarbonizar sus operaciones

Share

En el contexto actual, donde la eficiencia energética y la sostenibilidad son prioridades estratégicas, las baterías de almacenamiento de tecnología Litio Ferrofosfato (LiFePO₄) se han consolidado como una inversión de alto rendimiento y bajo impacto ambiental. Además de optimizar costos con esquemas de tarifa horaria, su fin de vida abre la puerta a la recuperación de materiales valiosos mediante procesos de reciclaje especializados una solución circular que protege el flujo de caja y la reputación ambiental de la empresa.

Por qué Litio Ferrofosfato  LiFePO₄ 

Las baterías LiFePO₄ permiten almacenar energía en horario base (menor costo) y descargarla en horario punta (mayor demanda), así como ofrecer respaldo de energía ante cortes en la red y cumplir los requisitos de potencia de usuarios del mercado eléctrico mayorista. Así, las empresas reducen costos operativos y aprovechan mejor la red eléctrica. Su química ofrece estabilidad, seguridad y una vida útil prolongada, por lo que el retorno de la inversión se distribuye a lo largo de años de operación constante.

Ventajas

Como lo hemos visto  anteriormente las ventajas de las baterías LFP no solo son una alternativa ética y sostenible, sino que también ofrecen ventajas prácticas.

Su costo de producción más bajo, un ciclo de vida el doble de largo que las antiguas baterías de litio y la no toxicidad tanto para las personas como para el medio ambiente las posicionan como líderes en el panorama actual del almacenamiento de energía en México.

Innovación Segura y Sostenible:

Un factor crucial que distingue a las baterías LFP es su seguridad inherente. Estas baterías no explotan, no son inflamables y, lo que es aún más importante, son reciclables hasta en un 98% de sus componentes. Esta combinación de seguridad y sostenibilidad abre un nuevo capítulo en la forma en que concebimos y utilizamos la energía.

El final del ciclo: un nuevo comienzo

A diferencia de otros equipos, una batería al final de su vida útil no es un desecho. Contiene materiales de interés económico e industrial, entre ellos:

  • Litio, hierro y fósforo (núcleo electroquímico).
  • Cobre y aluminio (conectores y cableado).
  • Plásticos industriales (carcasa).

Componentes químicos que requieren tratamiento adecuado para evitar impactos ambientales.

De acuerdo con estudios universitarios y publicaciones técnicas (p. ej., UNAM, BID, MDPI), es posible recuperar hasta el 95 % de los materiales cuando se aplican procesos de reciclaje especializados. Esto transforma el fin de vida en valor recuperado y en evidencia de buen desempeño ESG.

Proceso del reciclaje de la batería 

El reciclaje de baterías LiFePO₄ sigue una cadena controlada y segura:

  • Recolección y transporte: Las baterías usadas se almacenan en contenedores seguros y se transportan a centros de reciclaje especializados, cumpliendo con normativas para materiales peligrosos.
  • Inspección y clasificación: Se evalúa el estado de las baterías para determinar si pueden reutilizarse o deben reciclarse. Esto incluye pruebas de capacidad y clasificación por tipo.
  • Desmontaje: Se desensamblan las baterías para separar la carcasa, los módulos y componentes como el sistema de gestión de baterías (BMS).
  • Descarga segura: Las celdas se descargan completamente para evitar riesgos de incendio o explosión durante el reciclaje.
  • Trituración: Las celdas se trituran en un ambiente controlado para facilitar la separación de materiales.
  • Separación de materiales: Se utilizan procesos físicos y químicos para recuperar metales como litio, hierro, cobre y aluminio, así como plásticos.
  • Recuperación de materiales: Los materiales extraídos, como litio y fosfato de hierro, se procesan para reutilizarlos en nuevas baterías u otras aplicaciones.
  • Disposición de residuos: Los residuos no reciclables se tratan de manera segura según normativas ambientales.
  • Reutilización o fabricación: Los materiales recuperados regresan a la cadena de suministro, fomentando un modelo de economía circular.

Este modelo ya opera en países como Estados Unidos, Alemania y Corea del Sur. En México, empresas como ReLitio y SITRASA avanzan en la misma dirección, consolidando cadenas seguras de recolección y tratamiento.

Beneficios para el usuario final

  • Larga vida útil: operación de largo plazo bajo esquemas de tarifa horaria.
  • Optimización de costos: uso inteligente de la energía (base → punta) con impacto directo en OPEX.
  • Compromiso ambiental: hasta 95 % de recuperación de materiales en procesos especializados.
  • Seguridad y confiabilidad: prácticas avaladas técnica y científicamente.

La compra de baterías no es un gasto aislado, sino la entrada a un sistema circular: optimiza costos hoy y recupera valor mañana. Para la industria, LiFePO₄ representa una solución eficiente, segura y sostenible que acompaña a la empresa durante décadas.

Si quieres dar el siguiente paso hacia un futuro más sostenible, te invitamos a explorar las baterías de almacenamiento que ofrece Pireos Power.

Conoce nuestro casos de éxito →

Ángel leyva

ACERCA DEL AUTOR
Ángel Leyva

GERENTE REGIONAL

Experto en gestión de cuentas clave, con más de 6 años de experiencia en el sector financiero y de energías renovables. Su pasión por las energías limpias contribuye a un futuro más sostenible